Saludamos, como cada mañana, a nuestro gran amigo Jesús....
¡Haciendo la Señal de la Cruz!
Cuando María recibió la visita del ángel de Dios y éste le preguntó si quería ser la mamá de Jesús, María respondió con estas palabras: (repitámoslas todos juntos)
“Mi alma canta al Señor,
Porque me ha amado a mí, su sierva,
y en adelante todos me llamarán bienaventurada.
Él ha hecho en mí cosas maravillosas.
Su nombre es santo”.
Virgen María, tú eres nuestra madre del cielo,
nos guardas y nos quieres, como quisiste a Jesús.
Te damos las gracias y te ofrecemos nuestro cariño.
Ayúdanos a vivir cada día más unidos a Jesús.
Respondemos todos: "Te lo pedimos, María"