Nos preparamos:
Haz un momento de silencio.
Ponte en una postura cómoda y respira hondo para estar en paz por dentro.
Oramos:
Buenos días, Señor, buenos días.
Esta noche has cuidado de mí.
Yo quisiera que toda mi vida
fuera gloria y alabanza hacia Ti.
En tu nombre comienzo este día.
En tu nombre lo espero acabar.
Pensamientos, palabras y acciones
sean canto a tu inmensa bondad.
Rezamos Juntos: