16 de marzo de 2018

¡VEN, SEÑOR JESÚS!

Haz un momento de silencio. Ponte en una postura cómoda y respira hondo para estar en paz por dentro.



La Cuaresma es tiempo para desear la llegada de Jesús Resucitado. Por eso le decimos que venga, le pedimos que venga, y por eso vamos aprovechando cada día para incrementar ese deseo. ¡VEN SEÑOR, JESÚS!



Rezamos juntos:

               Aquí estoy Padre Dios....




Terminamos cantando muy alegres: 



Nos Despedimos:

Madre Divina Pastora, ruega por nosotros..
San Faustino , ruega por nosotros…
Beata Victoria, ruega por nosotros.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.

Amén