En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén
Lector:
Recitamos juntos el Salmo:
Aquí estoy, Señor, para hacer tú voluntad
Tú no quieres sacrificios ni ofrendas,
y, en cambio, me abriste el oído;
no pides sacrificio expiatorio,
entonces yo digo: «Aquí estoy.»
«–Como está escrito en mi libro–
para hacer tu voluntad.»
Dios mío, lo quiero,
y llevo tu ley en las entrañas.
He proclamado tu salvación
ante la gran asamblea;
no he cerrado los labios:
Señor, tú lo sabes.
Alégrense y gocen contigo
todos los que te buscan;
digan siempre: «Grande es el Señor»
los que desean tu salvación.
Lector:
Hacemos eco de alguno de los versos del Salmo. Podemos participar repitiendo en alto algún verso del Salmo que nos impacte más.
(tiempo para compartir)
AQUI ESTOY -DOBLE CLIP-
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.
Como era en el principio ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén
Aquí estoy Señor, para hacer tu voluntad.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.