2 de marzo de 2020

MISERICORDIOSOS COMO EL PADRE

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén
Lector 1
Iniciamos la semana recordando a un gran hombre, san Faustino; para nosotros Padre Faustino Míguez.
A lo largo de la semana vamos a recordar al Padre Faustino como un hombre ejemplo de misericordia, o lo que es lo mismo, "misericordioso como el Padre".
Pero, ¿cual es el significado de "misericordioso"? ¿de misericordia?.
Lector 2
La palabra misericordia, poco utilizada entre nosotros; hasta nos puede parecer que ha entrado en desuso. Si hacemos una estadística de los vocablos que utilizamos al final del
día tal vez no se recoja.
Tal vez nos preguntemos que si no la utilizamos es porque no es importante, no vale la pena, es un cultismo, ...
El Papa Francisco  nos ofreció un año entero para reflexionarla, vivirla, recuperarla ... porque para los cristianos es de valor. 
Lector 1
Pero, ¿Qué es la misericordia?.
La misericordia es el mayor amor que una persona puede experimentar. En el evangelio se utiliza esta palabra siempre que un hombre se acerca a otro con sentimiento de compasión que le impulsa a ayudarle. 
Para los cristianos es el Amor personal de Dios con cada ser humano.
Se manifiesta en amabilidad, asistencia al necesitado, especialmente en el perdón y la reconciliación. La misericordia es también un sentimiento de pena o compasión por los que sufren, que impulsa a ayudarles o aliviarles.
Lector 2
Tradicionalmente los cristianos resumían estos sentimientos en:
 Dar de comer al hambriento
 Dar de beber al sediento
 Dar posada al necesitado
 Vestir al desnudo
Visitar al enfermo
Socorrer a los presos
 Enterrar a los muertos
 Enseñar al que no sabe
 Dar buen consejo al que lo necesita
Corregir al que está en error
Perdonar las injurias
Consolar al triste
Sufrir con paciencia los defectos de los demás
Rogar a Dios por vivos y difuntos
Lector 1
Hemos cantado esta mañana: "Faustino amigo incansable del Señor , Faustino amigo del que no tiene voz ... a la niñez y juventud, diste tu vida ..."
San Faustino, con su vida, ha demostrado que ha puesto en práctica el mayor amor que una persona puede experimentar.
A lo largo de la semana lo iremos concretando. 
Hoy pidámosle que nos enseñe a experimentar el Amor de Dios en nuestras vidas como él lo experimentó en la suya.
Decimos juntos: Padre Faustino, ruega por nosotros. Amén.