28 de septiembre de 2017

A TODOS POR IGUAL

Nos preparamos:

Haz un momento de silencio. Ponte en una postura cómoda y respira hondo para estar en paz por dentro. 


En el nombre del Padre, Hijo y Espíritu Santo. Amén.




Comenzamos el día viendo un video sobre la parábola de los trabajadores de la viña:

 


Reflexionamos.....
¿Podemos medir el amor de Dios? dejamos hablar….
Pues el amor que nos ofrece Dios es así, sin medida, nos quiere por igual a todos. Al igual que el Padre Faustino, que amó sin medida, sin límites…
Y así tenemos que ser nosotros también, tratar a todos con igualdad y justicia.




Rezamos Juntos:


Aquí estoy Padre Dios
(las manos con el dedo índice hacia abajo, señalando el suelo)

dispuesto a abrir mis manos,
(las manos abiertas con palmas hacia arriba)


para parecerme a Jesús y al Padre Faustino
(manos entrecruzadas en el corazón y movimiento de latido)
para levantarlas con alegría
(cara sonriente y brazos extendidos hacia arriba)
para amar de corazón
( un abrazo)
para ayudar y dar la mano a todos.
(darle la mano al otro y un abrazo)
Bendice mis manos, Padre Dios.
(manos unidas en forma de cuento)



Nos Despedimos:
Madre Divina Pastora, ruega por nosotros..
Beatos Faustino y Victoria, rogad por nosotros.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.