Nos preparamos:
Haz un momento de silencio. Ponte en una postura
cómoda y respira hondo para estar en paz por dentro.
Vosotros sois muy afortunados, porque tenéis una familia que os alimenta, os quiere, os cuida y se preocupa por vuestra educación. Tenéis juguetes, vais al colegio y podéis vivir en paz. Pero hay muchos, muchísimos niños en nuestro mundo que no son tan afortunados y esto hay que tenerlo muy en cuenta. Por eso, hoy pedimos por todos ellos.
Juntamos nuestras manos y rezamos:
Jesús, te pedimos que nos cuides a todos:
a los que lo tienen todo y a los que nada tienen,
a los que están alegres y a los que están tristes,
a los que pasan hambre y a los que les sobra comida,
a los que tienen buena salud y a los que están enfermos,
a los que tienen juguetes y a los que disparan con armas de verdad, a los que trabajan y a los que estudian.
Escuchamos una canción:
Nos despedimos:
Madre Divina Pastora, ruega por nosotros..
San Faustino , ruega por nosotros…
Beata Victoria, ruega por nosotros.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.
San Faustino , ruega por nosotros…
Beata Victoria, ruega por nosotros.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.