19 de octubre de 2018

SEÑOR, AYÚDAME A CAMBIAR EL MUNDO

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Lector 
Una de las grandes aportaciones que podemos hacer cada uno por las misiones y los misioneros es orar por ellos.
En esta mañana nos unimos en nuestra oración a la oración que la Iglesia nos pide en esta jornada del Domund recitando juntos:
Señor, ayúdame a cambiar
para cambiar el mundo.
Necesito renovar el corazón,
la mirada, mis modos de hacer,
para no terminar en un museo.
Y no es solo renovar lo viejo:
es permitir que el Espíritu Santo
cree algo nuevo.
Señor, vacíame de mis esquemas
para hacer sitio a tu Espíritu
y dejar que sea Él
quien haga nuevas todas las cosas.
Él nos envía, nos acompaña, nos inspira;
Él es el autor de la misión,
y no quiero domesticarlo ni enjaularlo.
Haz que no tenga miedo
de la novedad que viene de Ti,
Señor Crucificado y Resucitado.
Que mi misión sea comunicar tu vida,
tu misericordia, tu santidad.
Enséñame a amar como Tú
para cambiar el mundo.
Amén.
Lector 
Pedimos a Dios por los misioneros, para que, a pesar de las dificultades, no desfallezcan en su labor de cambiar el mundo y sigan contagiando el amor que han recibido de Dios. 
Oremos.         (hacemos un silencio orante)
Pidamos por los jóvenes, para que no tengan miedo de buscar, descubrir y anunciar a Jesús, y, como Él, entregarse generosamente al servicio de los hermanos.  Oremos. 
                     (hacemos un silencio orante)
Por los misioneros que han tenido que regresar por diferentes motivos, para que vivan con paz y sientan que, desde donde están, pueden seguir contribuyendo a que el mundo cambie.  Oremos.
                      (hacemos un silencio orante)
Tenemos en nuestra oración un recuerdo para Madre María Luisa, nuestra antigua directora del colegio, para que nuestra oración le sirva de fortaleza para contribuir a hacer vida el Evangelio en las tierras de Ecuador. Oremos.
                        (hacemos un silencio orante)
Pedimos a María, nuestra Madre del cielo, que sea el sustento y guía de los misioneros. Decimos juntos: Dios te salve María, llena eres de gracia, el Señor ...
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo ...
MARIA, REINA DE LAS MISIONES; RUEGA POR NOSOTROS.